LA PANDEMIA DEL PARO

A MICRÓFONO CERRADO

 Hipólito Martínez,

director y presentador del programa
 

Este año, la festividad agridulce del Bando de la Huerta (¿quién no echó de menos la habitual algarabía de nuestra fiesta más entrañable?), acalló la repercusión de unos datos del paro que sorprendentemente fueron mejores que los previstos. Desde el Gobierno central, en vísperas de lo que dictara el SEPE, ya habían avisado de unos registros negativos, que afortunadamente no se cumplirían.

Vieja táctica ésta: la de ponerse la venda antes de la herida; a buen seguro, se trataba de  una elemental técnica de márketing político para vendernos unos datos que sin ser buenos -no lo pueden ser en absoluto con casi cuatro millones de parados-, no son tan nefastos como se auguraba en algunos círculos. El objetivo no era otro sino convencernos de que pese a todos los males, la nave va. Ya veremos adónde…

También en la Región, en marzo, el paro da un respiro; en nuestra Comunidad se reduce el número de desempleados en 1857 personas, que ya disponen por fin de un puesto de trabajo desde donde poder afrontar el futuro con un mayor optimismo. Nos alegramos por todos y cada uno de esos 1857 murcianos que han alcanzado la meta de un empleo. Una meta que, por desgracia, queda lejana todavía para más de 121 mil personas en nuestra Comunidad. Aun así el número de desempleados baja por primera vez desde octubre, gracias a las contrataciones de primavera y Semana Santa.

En datos porcentuales, el paro se reduce  en un 1,51% respecto al mes de febrero. Puede parecer poco, pero es mucho; máxime dada la situación límite que vive nuestra economía. 

No obstante, este exiguo porcentaje no ha podido impedir que exactamente 121.473 murcianos sigan sin poder ejercer su derecho al trabajo. Una cifra todavía enorme, que demuestra que el camino va a ser largo y duro. A nivel anual, los datos son más negativos, porque se observa un incremento de 14.161 personas más sin empleo desde marzo de 2020, un 13,20% más.

Por sexo, nuestro paro sigue siendo mayoritariamente femenino: 73.408 mujeres desempleadas frente 48.065 hombres en su misma situación. Hasta en el descenso experimentado se percibe una diferencia muy relevante;  mientras que el  paro femenino se reduce en 861 desempleadas, el masculino lo hace en mayor proporción (casi un millar de hombres consiguieron empleo).

Por sectores, el de los Servicios es el que concentra casi todo el descenso del número de desempleados del mes de marzo en la Región. En términos absolutos, se redujo en 1.702 personas. Así que no hay que hacer muchas cábalas para saber a qué se debe la reducción del paro.

Resulta evidente que cuando se relajan las medidas anticovid, la economía se mueve de la mano del sector servicios; sin embargo la pandemia aún no se ha ido, y si la cuarta ola descargara su ira sobre nosotros, presumiblemente habría que volver a endurecer las restricciones con el consiguiente daño a nuestro mercado laboral. Es decir, la mejoría podría ser flor de un día de primavera…

A su vez, la afiliación media a la Seguridad Social en la Región se situó en marzo en 598.935 personas, lo que supone en términos absolutos un aumento de 4.986 personas con respecto al mes anterior (0.84%, el tercero más alto del país, sólo por detrás de Baleares, 1.52% y Cantabria, 0.89%). La afiliación creció en 8.211 personas en los últimos doce meses.

En suma, casi 1.900 parados menos y casi cinco mil afiliados más a la Seguridad Social es el balance de marzo, que ha sido mejor de lo esperado en nuestra Comunidad. Empero, todavía aguarda un tortuoso camino para más de 121 mil murcianos que siguen buscando empleo. De cómo evolucione la pandemia (y el proceloso sistema de vacunación) dependerá en gran medida su suerte. Que es también la nuestra.