¿ESTRATEGAS QUIERE EL PP?
26 octubre 2023,
Está tan puesto el foco nacional en los preparativos de la suponemos-que-investidura de Sánchez que a veces perdemos de vista lo que ocurre en el suponemos-que-principal partido de la oposición, es decir, el Partido Popular. Se ha anunciado que Feijóo dará pronto a conocer algunos cambios en la cúpula del partido y en la dirección del grupo parlamentario. Varios analistas describen a Génova 13 (la sede de los populares) como “un hervidero de rumores”. A la incertidumbre de la situación política general se une, pues, la que reina en las alturas del PP. El líder, como suele ocurrir en los grandes partidos, tendrá la última palabra.
Entre los rumores que corren por la villa y corte hay varios que apuntan, en sentido autocrítico, hacia la necesidad de contar con una estrategia política clara. Tienen algunos la percepción de que no la hubo en el trayecto entre el éxito de las elecciones municipales y autonómicas de mayo y la decepción de las generales de julio, e incluso tampoco desde estas hasta el presente. Enfrente, sin embargo, los socialistas sí la tuvieron y la siguieron a rajatabla hasta doblegar las expectativas triunfalistas de los de Feijóo.
Del enemigo el consejo, podría decirse. Y es más, porque hasta ha salido publicado en los periódicos que algunos dentro del partido piden un Iván Redondo para el PP. ¿Recuerdan? Sí, Iván Redondo, el consultor político y de comunicación al que Sánchez confió la moción de censura contra Rajoy en 2018 y su estrategia posterior al frente del ejecutivo, ya como Director de Gabinete de la Presidencia del Gobierno, hasta que Sánchez decidió prescindir de él, o él de Sánchez, en el verano de 2021.
Lo más parecido a Redondo que ha habido en el PP (es decir, alguien no afiliado pero con influencia en las estrategias políticas y electorales) ha sido el sociólogo Pedro Arriola, que asesoró tanto a Aznar como a Rajoy. Era de un estilo distinto, más de vieja escuela frente a la mayor modernidad en los métodos y en las funciones de Iván Redondo. En resumen, lo que algunos piden es que alguien desde fuera tenga la capacidad y una cierta autoridad profesional para interpretar el presente y detectar el futuro sin la presión de tener que rendir cuentas internamente al partido.
No sé yo, no sé yo si el PP y Feijóo tendrán tanta altura de miras como para permitirlo. Siempre se puede confiar en alguien de dentro, aunque la procesión va por ídem y eso puede contaminar la visión de las cosas. ¿Estrategas tiene el PP? Muchos lo dudan porque no siempre quienes integran el equipo de confianza que rodea al mando tienen las mentes claras, precisas y desacomplejadas para cumplir tal cometido. Creo que no le faltarían novias al PP para ejercer esa tarea. Otra cosa es que el novio se deje.