LA CRISIS QUE VIENE O NO
01 diciembre, 2022
Andan unos y otros pendientes en el panorama político español, mientras afinan la puesta en marcha de sus maquinarias electorales de 2023, de si la tan cacareada crisis económica viene, ya ha venido o vendrá… o quizás las tres cosas a la vez, que todo es posible e incluso compatible. Con tantos recursos económicos que nos vienen de Bruselas, la lluvia de millones con que se nos riega puede impedirnos ver lo tenebroso del panorama si se cumplen ciertos presagios que los indicadores macroeconómicos dibujan en el horizonte.
Unos, en el gobierno, confían en que no se desate la tormenta y que las ayudas para todo tipo de necesidades calmarán al tembloroso ciudadano de a pie… que ya le ha visto las orejas al lobo en la bolsa de la compra, en su contador de luz y en la gasolinera en la que mediollena el depósito de su automóvil. Todo anda pendiente de un hilo, y si las empresas empiezan a caer, el castillo de naipes de las ayudas estatales puede venirse abajo en un santiamén.
Otros, desde la oposición, enarbolan las voces de alarma sobre lo que consideran parches que el gobierno utiliza para calmar al pueblo llano. Tapona, dicen, fugas de agua pero enseguida surgen otras que amenazan con hundir el barco. Es más fácil, desde luego, la crítica desde fuera sin responsabilidades de gobierno, pero tampoco se les puede llamar irresponsables totales si tantas autoridades más o menos independientes o neutrales, nacionales e internacionales, coinciden en rebajar las expectativas o las cifras del gobierno.
Ciertamente no sabemos el calibre de la que nos viene encima… si es que viene. En esta ocasión, a diferencia de la anterior crisis de 2008-2014, la Unión Europea ha apostado por el intervencionismo en contra de lo que parecían antaño inamovibles criterios de austeridad. Puede que nos salve, al menos parcialmente, o que mitigue los efectos de la temida recesión.
Para más inri, las incertidumbres geopolíticas no ayudan. Se cierne el invierno sobre Ucrania y nada hay claro sobre el futuro de esta guerra y de sus consecuencias. En Irán las manifestaciones contra el régimen de los ayatollah alcanzan grados que preocupan al establishment del país. Hasta en China sus habitantes se indignan contra las políticas anti Covid de su gobierno. Hay una especie de totum revolutum de consecuencias imprevisibles.
Una de las grandes preguntas que nos podemos hacer en España de cara al electoral 2023 es: ¿será la economía el asunto clave a la hora de accionar el voto? Queda mucho partido todavía como para responder de forma tajante a esta pregunta, y muchos otros temas en el candelabro, que diría aquella…